Es increíble que en pleno siglo XXI en un país como Colombia, que se encuentra en desarrollo, tratando de mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos, atascado en medio de una paradoja al intentar mejorar el caos vehicular y que además quiere proyectar una imagen de un país en desarrollo no logre encontrar una solución definitiva con el tema de las carretillas de tracción animal.
¿Hasta cuándo seguiremos aguantando la negligencia de nuestros gobernantes en no querer buscar soluciones definitivas que nos saquen de este atraso vergonzoso y a la vez inhumano?, en donde no solo están en juego las implicaciones de movilidad y urbanismo sino también las del maltrato animal.
Mirando por todos lados en las calles de la Sultana nos encontramos animales lacerados, desnutridos y maltratados, sometidos a largas y penosas jornadas. No creemos que no existan personas que no les interese la situación, pero la conclusión a la que llegamos, sin ser expertos en la materia, es que detrás de este negocio siguen existiendo manos oscuras que se están lucrando con la explotación y muerte de estos animales.
Un grupo ambientalista de personas en Cali, con impacto en toda Colombia, han liderado campañas reconocidas a nivel mundial por su labor, tratando de ayudar a salvar las vidas de estos animales, pero además de salvar las vidas de estos seres vivos humillados, también están ayudando indirectamente a mejorar la calidad de vida y el desarrollo de la ciudad en términos de movilidad, tema espinoso que creemos le corresponde solucionar a los administradores de la gestión pública, en primera instancia, haciéndose una y otra vez los de los oídos sordos. ¿Quiere seguir siendo tolerante con esta situación? La invitación es a que no lo sea, precisamente por no despertar la intolerancia dormida es que muchos creen que el país es de pocos, y hasta la última vez que conté… es de todos.
Pd: Al equino de la foto que acompaña la nota se ve que lo tratan bien. Habíamos tomado una foto de uno muy maltratado pero no consideramos que la violencia gráfica explicita sea tan efectiva para despertar conciencias como muchos creen. Así que mejor imagínese que al animalito de la foto le toca trabajar (como a muchos de nosotros) pero no en condiciones tan desfavorables (como a muchos de nosotros).
Pd: Al equino de la foto que acompaña la nota se ve que lo tratan bien. Habíamos tomado una foto de uno muy maltratado pero no consideramos que la violencia gráfica explicita sea tan efectiva para despertar conciencias como muchos creen. Así que mejor imagínese que al animalito de la foto le toca trabajar (como a muchos de nosotros) pero no en condiciones tan desfavorables (como a muchos de nosotros).
