“Colombia y Brasil, son hoy, los referentes en términos de gestión y desarrollo institucional de la danza en América Latina”, afirmó Silvie Durán, especialista en gestión cultural y miembro de la Junta Directiva de la Asociación para el Desarrollo de la Industria Musical Iberoamericana.
“Para la Dirección de Artes del Ministerio de Cultura este evento ha sido fundamental, no solo porque ha sucedido en Cali que es una ciudad reconocida como un foco de danza a nivel nacional e internacional, sino porque logro reunir a personalidades de la gestión y el trabajo en red de este sector en Colombia y Latinoamérica para pensar nuevas conexiones con la danza nacional e internacional gestadas desde nuestro país“, afirmó Juan Pablo López, Asesor de la Dirección de Artes del Ministerio de Cultura.
El evento ha sido considerado como uno de los espacios académicos más importantes para el sector de la danza en la región. Durante tres días más de 120 coreógrafos, bailarines, gestores y promotores nacionales, representantes de todos los géneros del arte del movimiento debatieron sobre modelos y estrategias novedosas para la gestión, circulación y distribución de la danza en la región.
“Creo que hemos logrado nuestro cometido, el encuentro se convirtió en un espacio de diálogo que aporta al Plan Nacional de Danza y que seguramente permitirá enriquecer la implementación de acciones y modelos de gestión que han sido exitosos en otros países de la región”, expresó Angela Beltrán, Coordinadora del Grupo de Danza de la Dirección de Artes del Ministerio de Cultura.
Y agregó que: “Surgen grandes iniciativas desde el sector luego del encuentro como lo es la creación de la Red Nacional de Danza. A su vez, nuestro plan es una realidad y un modelo de gestión que irradia en toda América Latina sus fortalezas, esto no es un objetivo sino una certeza que hemos logrado confirmar gracias a los conceptos que compartieron los expertos internacionales”.
Según Octavio Arbeláez, representante de Redlat Colombia: “es un gran trabajo cuando se ven los antecedentes del Plan por convocar al sector y lograr su representatividad. Su apuesta es muy integral en términos de emprendimiento porque busca trabajar y capitalizar en tres énfasis: formación en emprendimiento y gestión cultural, fortalecimiento de procesos asociativos y de conformación de redes, y formación para la participación y organización del sector, elementos capitales en el desarrollo y promoción de la danza nacional”.
Durante el encuentro se compartieron experiencias de organizaciones de América Latina y Colombia que han transitado exitosamente el campo de la gestión, el emprendimiento cultural, el trabajo colaborativo, y de redes consolidadas y en construcción.
“Descubrimos nuevas formas de responsabilidad social para gestionar nuestros proyectos. Además en el encuentro nace la posibilidad de vincularnos al Plan Nacional de Danza, es importante no estar solos”, expresó Luz Alejandra Aguilar, Directora de Eventos de la Fundación Carnaval de Barranquilla.
“El encuentro fue oxigenación, cercanía como trabajo en equipo para visualizar el hoy y para construir un futuro cercano en asociación”, Zuleyma Asprilla, representante del Ballet Folclórico de Antioquia.
“Este encuentro es lo mejor que le ha podido pasar la danza, conocí pares con los que voy a trabajar grandes proyectos”, dijo Henry Arteaga de Crew Peligrosos.
La programación académica contempló una agenda de conferencias como la ‘Sostenibilidad en la gestión cultural: una perspectiva sistémica’, de Silvie Durán, especialista en gestión cultural y miembro de la Junta Directiva de la Asociación para el Desarrollo de la Industria Musical Iberoamericana.
“Los emprendedores de la danza deben tener una visión creativa de sus proyectos, pensar en productos sostenibles y preguntarse cómo pueden incidir como sector en la sociedad civil. Los estados en América Latina deben buscar apoyar desde la política, los mercados, el posicionamiento, la identificación de la demanda y de los nichos, la formalización del emprendimiento, la sostenibilidad y la creación de circuitos regulares”, dijo Durán.
Para esta experta nacida en Costa Rica, en el arte las decisiones y motivaciones se dan desde muy temprana edad, por esto al interior de un proceso colectivo es muy importante definir qué ofrece y porqué sería importante invertir en su proyecto, así como cuál es el circuito de su propuesta, dónde ejerce la danza y qué función social cumple, para que de esta manera pueda identificar quién estaría interesado en ayudar a gestionar su iniciativa y esto necesariamente tiene que ver con inversión.
La agenda también contempló la presentación de la Conferencia Estrategias de Gestión a cargo de Octavio Arbeláez, director del Festival Internacional de Teatro de Manizales, quien precisó que en el caso colombiano la gestión cultural comenzó a cobrar trascendencia desde la concepción del rol de la cultura como tema trascendental de la economía desde los años setentas y la necesidad de generar políticas culturales más allá del patrimonio y de las artes.
“Las formas de producción de las artes escénicas siempre han sido modelos de emprendimiento, siempre hemos jugado el rol de artistas y de emprendedores, pero le apostamos a la creación y no a la circulación, la distribución y el intercambio. Es necesario pensar en la calidad y la autocrítica y que nuestra creación debe ser única e irrepetible”, afirmó Arbeláez.
Otro de los temas de discusión durante el evento fue la trascendencia de las redes en la gestión de los colectivos culturales y la importancia de entender el contexto de la globalización para tener la capacidad de operar y ofertar en este escenario.
Según Mariana Segura, experta argentina, representante de la Red Suramericana de Danza, con la globalización la percepción del tiempo y del espacio se transformó porque un hecho puede ser vivido simultáneamente en el mundo. En este sentido el desafío es crear mercados en este contexto y trabajar desde una competitividad positiva que nutra y favorezca.
“El concepto de multitud nos remite a la diversidad y ese es el potencial de activación de las redes con las que se puede construir un nuevo mundo. El sector cultural no puede ser víctima, debe ser sujeto de cambio y en este nuevo mundo una posibilidad son la redes y la globalización”, precisó Segura.
Para esta experta, Coordinadora Metodológica y Urbanista, especialista en Planteamiento Participativo y Gestión de Redes de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales Flacso, Argentina, el universo de la danza está inmerso en nuevos paradigmas y modelos de posibilidades como las redes. De esta manera, ahora se vive desde la centralidad relativa, la complejidad, la simultaneidad y en términos de redes lo más importante no son los colectivos si no como se relacionan.
Información de: Ministerio de Cultura de Colombia
Fotografía: Juan David Padilla